¿Cómo sé si tengo fascitis plantar?
La primera pregunta que me formulan los pacientes es: ¿Qué es una fascitis plantar?
La fascitis plantar es un cuadro que se caracteriza por dolor en el talón (generalmente al primer apoyo de la mañana) Mucha gente lo conoce como “espolón calcáneo”, porque antes se creía que era causado por un sobrehueso en el talón. Hoy se sabe que esto no es así, y que la fascia plantar (es un tendón de la planta del pie) es la causa del dolor.
Una vez que saben que es, se preguntan: ¿por qué a mí ?
La fasciitis plantar es una patología muy frecuente, que vemos a diario en el consultorio.
No se sabe con precisión porque algunos pacientes desarrollan esta patología. Les ocurre tanto a jóvenes como a gente grande, a mujeres y a hombres. El factor más frecuente es un acortamiento de los músculos de la pantorrilla y planta del pie. Existen también otras dos causas bien identificadas: 1) estar más de 6 hs por día parado y 2) el sobrepeso. Sin embargo, muchos pacientes no tienen una causa concreta.
Aún así el cuadro a veces no es claro y como tienen dudas me preguntan: ¿Cómo sé si tengo fascitis plantar?…
Los pacientes que padecen fascitis plantar consultan por dolor en el talón (a veces en el arco interno del pie), que comienza típicamente al levantarse a la mañana, con el primer apoyo del pie (o a la noche para ir al baño). Este dolor suele ir mermando a lo largo del día. Es muy común que los pacientes esperen que este dolor desaparezca solo, y por ello van a consultar luego de semanas o meses desde qué comenzó.
Otra consulta frecuente es acerca de cómo deben estudiarse estos pacientes: ¿Qué estudios debo realizarme para hacer el diagnóstico de fasciitis plantar?
El diagnóstico de fascitis plantar es clínico. Es decir, interrogando y revisando al paciente. Cuando existen dudas se puede solicitar una ecografía o mejor aún una resonancia magnética. La radiografía no ayuda al diagnóstico (se usaba hace años para ver el espolón calcáneo, práctica que actualmente no se usa)
En definitiva, es un cuadro que requiere un diagnóstico y tratamiento preciso. Lo ideal es que sea abordado de entrada por un especialista, para resolver el problema cuanto antes.